Había una vez una mano.

Cuando pensamos en la vida siempre nos llega al pensamiento la imagen de las personas queridas y los seres que nos brindan apoyo y amor por sobre todas las cosas. A veces no sabemos distinguir que existen clasificaciones para los amigos: 

 El amigo que te utiliza: solo te escribe cuando te necesitan o te llaman para pedirte un favor.

 El amigo negativista: Una cosa es ser honesto/realista y otra ver todo malo o imposible.

 El amigo quejica: No son los que alguna vez te cuentan sus problemas, sino aquellos que te cuentan una y otra vez sus mismos dramas y pretenden que los demás tomen decisiones por ellos. Pero ellos pocas veces hacen cambios para mejorar su vida.

 El que todo lo crítica: Si alguien está continuamente criticando tu vida, tu forma de vestir o cualquier otro aspecto, no es buena señal

Un amigo: es alguien que nos hace bien, que nos ayuda y que nos inspira. Esa hermosa persona que tiene siempre los brazos abiertos para abrazar, las palabras exactas para regañar, las lágrimas para derramar y un corazón para compartir. Alguien en quien podamos confiar y nos ayude a descubrir juntos como dar mejores pasos en la vida.